No fue una maravilla y sufrió en los minutos finales, pero Brasil le ganó bien a Venezuela y terminó primero en el Grupo C. Ahora, los de Dunga enfrentarán en cuartos de final al Paraguay de Ramón Díaz.

Sin Neymar y con un juego que escaseaba, Brasil salió a enfrentar a Venezuela consciente de que un paso en falso podía ser una catástrofe: por el empate entre Colombia y Perú, una derrota equivalía a armar las valijas y volver a su país como último del grupo C. Pero no llegó a existir tal peligro. A los 8 minutos, Thiago Silva le rompió el arco a Baroja y el equipo de Dunga sólo sufrió en los minutos finales, luego del descuento de Fedor, para lograr una merecida victoria que lo dejó como primero del grupo y clasificado a los cuartos de final, donde enfrentará al Paraguay de Ramón. Con ese 2-01final, el Scracht eliminó a Venezuela de la Copa y mandó a Colombia (finalizó tercero en el grupo) a medirse con la Selección Argentina en cuartos.

Ante la suspensión de Neymar, el único integrante del plantel brasileño capaz de ganar un partido por sí solo, Dunga apeló a Robinho, quien es considerado suplente para el entrenador. El actual futbolista del Santos jugó como para poner en duda al técnico. Libre, preciso con la pelota y muy participativo, Robinho se movió de derecha al centro y armó una sociedad interesante con Willian, el volante con look afro que manejó los hilos del mediocampo de Brasil. Con las subidas de Dani Alves, la experiencia de Thiago Silva en dupla con Miranda en el fondo, la presión de Fernandinho y Elías, Brasil demostró ser superior a una Venezuela que apostó a dos líneas de cuatro en su campo para achicarle los espacios al rival con el objetivo de salir rápido de contra en cuanto recuperara la pelota. La estrategia no resultó porque la Verdeamarela logró encontrar los huecos para filtrarse y la idea de buscar el contragolpe tampoco funcionó porque Brasil achicó hacia adelante y no le dio la oportunidad a Rondón y Cía. de poder lastimar.

El segundo gol fue una muestra del buen juego que mostró Brasil por momentos. Como si la ausencia de Neymar hubiera hecho reaccionar al plantel de que debía aparecer el fútbol si quería continuar en la Copa. Dani Alves y Robinho tocaron sobre la derecha, el delantero la cambió hacia el otro lateral para Filipe Luis, quien la abrió aún más hacia Willian. El volante, en el mano a mano, dejó en el camino a su rival y, ya dentro del área, lo vio a Firmino que entraba solo por el medio. Con un gran pase de tres dedos, dejó a su compañero solo frente al arco. Y el 9 no falló y la mandó a guardar.

Cuando el partido estaba liquidado, Fedor aprovechó un rebote que dio Jefferson en un tiro libre de Arango y le puso suspenso al resultado en los minutos finales. Salvo un centro que el propio Fedor no llegó a conectar, Venezuela no contó con ninguna situación para empatar el encuentro. Brasil, sin Neymar y sin haber jugado bien los dos primeros partidos, se reivindicó y sacó pasaje a los cuartos de final. Sin su estrella, parece, también puede.